sábado, 12 de mayo de 2012

Evaluación del Sistema Motor, reflejos neurales


El vídeo muestra una exploración rutinaria de los reflejos neurales, entre ellos el reflejo del bíceps, el reflejo braquiorradial, el reflejo del tríceps, etc.

Exploración de Reflejos
Los reflejos se obtienen percutiendo con un martillo de reflejos y con movimiento de muñeca, un tendón o una saliente ósea; este estímulo ocasiona estiramiento del músculo, respondiendo con una contracción brusca. 

Principios básicos para su exploración:
  1. Se utilizará el martillo de reflejos.
  2. Mantener el martillo entre dedos pulgar e índice.
  3. El golpe ha de ser directo y rápido (no oblícuo).
  4. El miembro a examinar debe estar relajado.
  5. El estímulo debe ser de igual intensidad en ambos lados.
  6. Comparar rapidez, fuerza y amplitud de la respuesta en ambos lados.
  7. No usar más fuerza de la necesaria para obtener una respuesta.
  8. En caso de dificultad para obtener respuesta usar el refuerzo, esta es una contracción isométrica de otros músculos que aumentan la actividad refleja.
Los reflejos de valoran en grados siguiendo la escala del 0 a +4:
  • +4 hiperactivo, muy brusco.
  • +3 mayor rapidez que el promedio.
  • +2 respuesta normal promedio.
  • +1 ligeramente disminuido.
  • 0 ausencia de respuesta.
Principales reflejos a explorar:
Reflejo bicipital.
Se integra a nivel medular en los segmentos C5-C6. Se explora con el brazo del paciente flexionado a nivel del codo con la palma hacia abajo, a continuación se apoya el pulgar u otro dedo sobre el tendón del biceps, se percute con el martillo de reflejos de tal forma que el golpe se transmita a través del dedo del explorador hacia el tendón del biceps, la respuesta esperada es la flexión del codo apreciándose la contracción del músculo biceps.

Reflejo tricipital.
Se integra a nivel de los segmentos medulares C6-C7. La forma de explorarlo consiste en flexionar el brazo del paciente a nivel del codo, con la palma dirigida hacia el cuerpo, luego se procede a percutir el tendón del triceps inmediatamente por encima del codo. La respuesta esperada es la extensión del codo con contracciòn del músculo triceps. En ocasiones resulta difícil el lograr que el paciente esté completamente relajado, aquí se puede sostener la parte alta del brazo, solicitando al paciente que se relaje, luego se percute el tendón del triceps.

Reflejo braquioradial o del supinador largo.
Se integra en los segmentos medulares C5-C6. La mano del paciente apoyada en el abdomen o en el regazo, con el antebrazo en pronación parcial, luego se percute el hueso radio 3 a 5 cm. por encima de la muñeca, la respuesta esperada es la supinación y flexión del antebrazo.

Reflejo rotuliano o patelar.
Se explora con el paciente sentado o acostado con la rodilla flexionada y relajada. Se percute el tendón del cuadriceps femoral inmediatamente debajo de la rótula, se espera la extensión de la rodilla con contracción del cuadriceps. Se lleva a cabo generalmente con el paciente sentado, el muslo apoyado sobre el contralateral. Estando el paciente en decúbito supino se pueden usar dos métodos, el primero consiste en sostener ambas rodillas juntas y posteriomente percutir el tendón rotuliano, explorando un reflejo y después el otro en forma repetida, lo cual permite estimar pequeñas diferencias, sin embargo sostener ambas piernas resulta incómodo en ocasiones para el clínico, una opción válida en la que el brazo del examinador se apoya en la pierna opuesta.

Reflejo aquíleo.
El reflejo se integra principalmente a nivel de S1. Se explora con la pierna algo flexionada a nivel de la rodilla, realizando una flexión dorsal del pie desde el tobillo y se percute el tendón de Aquiles, la respuesta esperada es la flexión plantar a nivel del tobillo. 

No hay comentarios:

Publicar un comentario